Quem produz o que é essencial para sobreviver em tempos de pandemia? Lilian Soto, feminista e pesquisadora do Centro de Documentação e Estudos, nos convida a refletir sobre a resistência das mulheres ao extrativismo através do nosso trabalho diário.

Nós, da Articulação Feminista Marcosur, expressamos nossa preocupação com a crise global sanitária, a qual representa um risco para toda a população, levando os Estados a tomar medidas que tem um impacto diferenciado sobre as mulheres e as populações que estão em estado de maior vulnerabilidade. A atual crise econômica e social coloca em evidência o desumanizante modelo econômico capitalista e patriarcal que predomina no mundo.

Como parte de la campaña de la Articulación Feminista Marcosur, el equipo de CISCSA y otras compañeras activistas nos sumamos a la marcha del lunes 9 de marzo para pensar colectivamente sobre los fundamentalismos que nos quieren imponer una única forma de sentir, pensar y vivir.

El llamado de los estudiantes que incitó e inició la protesta fue “Evadir y no pagar”. Desde entonces, la ciudadanía se mantiene alerta y prendida a sus demandas, insistentes y reiteradas en los últimos años porque “no son 30 pesos, son 30 años”, decían.

Durante esos días se registró y debatió sobre los principales desafíos feministas planteados en una situación de explosión social colectiva, ampliada, múltiple, plural, que tiene en común un cuestionamiento de fondo del modelo neoliberal.

En un país con 108 denuncias diarias por violencia de género (29.467 entre enero y setiembre de 2019), en el marco del Día Internacional Contra la Violencia de Género se realizó una marcha multitudinaria, concentraciones y performances en todo el territorio nacional.

Las mujeres peruanas, en toda nuestra diversidad, tomamos las calles el pasado 23 de noviembre para exigir justicia y demandar al Estado la protección de nuestros derechos. Por la eliminación del patriarcado, el machismo y los fundamentalismos.

La actividad se realizó en la Plaza Italia de Asunción, antes de la marcha por el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres y tuvo repercusión internacional. Unas 60 mujeres se sentaron en la mitad de la plaza a trenzarse el cabello las unas a otras, para simbolizar los vínculos de confianza ente las mujeres.